Llega el otoño comienza el ocaso de los días, las hojas perecen con un ocre por color. El viento azota los árboles y desnudos van quedando ante el frío sol, que ya no tiene fuerza para darles calor.
Cortos se hacen los días y largas las sombras a medía tarde, las noches oscuras y eternas se vuelven , ya no brilla la luna con su plateado resplandor.
Los días se van tornando grises y melancólicos a medida que se va alargando la estación y va dando paso al frío invierno con su manto blanco.