Managua, 27 de octubre de 2014.
Al encontrarnos los dos,
trataré de poner freno
a mis ansias adolescentes
que han llegado en mi madurez.
Al encontrarnos los dos,
No me pidas que me detenga:
¿Cómo pedirle a un camión sin frenos
que se detenga en la cuesta y
frene en las curvas?
Al encontrarnos los dos,
Mis manos aceleradas
recorrerán toda tu ruta y
desde la primera hebra,
llenará cada espacio de tu cuerpo,
con el calor que hierve
en la pasión que contiene y
abrirá espacio a los besos
que conocerán cada poro de tu piel
y subirán colinas y recodos.
Al encontrarnos los dos,
los suspiros y las entregas:
Mi entrega total y
tu entrega
que recibe la mía
como ofrenda
en sendos sacrificios de amor y
luego...
yo seré en ti y tú serás en mí.
Amada mía, para siempre los dos.