Ya es un dulce recorrido de años,
encuentro de virtudes, soporte de actitudes.
Florecita de mis noches, horizonte de mis días.
Hermosa, ojitos de serenidad, fuente
espesa de mis mejores versos,
fuente incesante de cotidianos pensamientos,
fuente absoluta de miradas y reflejos.
Ya son años, esquinas, cerros y cuentos,
muchas historias y futuros proyectos,
ansias de búsquedas, necesidades de silencios,
nocturnas complacencias y diurnas transparencias.
Son tantas esquinas bautizadas por besos,
son tantas nubes que llevas infinitos recuerdos,
son tantos giros ilesos.
Es tanto de todo, que ya soy tuyo más que de todo.
Hemos andado y resuelto, juntos, laberintos,
hemos creado, juntos, constelaciones
hemos logrado, juntos, nuevas versiones
de viejas razones,
hemos perseguido, juntos, metálicos horizontes,
y hemos atrapado, juntos, torpes y bruscos cenzontles.
Risueña amiga, pintura hábil y eterna,
música convertida en tiempo y flor,
asidua acompañante de mi tiempo trovador.
Amiga mía, esposa mía, congruencia mía.
Son años juntos en este mundo que no es más que un tranvía.