Sin Retorno
Una profunda tristeza
le dejó el alma partida,
al ver que ya no regresa
el gran amor de su vida.
Cada mañana él la espera
de pie allá en la estación,
y siente que se congela
su angustiado corazón.
Cuando ve llegar un tren
y los viajeros descienden,
se asoma presto al andén,
sufre porque ella no viene.
Llora en silencio su ausencia
ya se borró su sonrisa,
le hace falta su presencia
para que alegre su vida.
Ya perdió las esperanzas
de que ella vuelva algún día,
y se ha impregnado en su alma
una cruel melancolía.
Winda
(Señora Melancolía)
México