La lluvia moja las aceras de las calles,
las carreteras y patinan los coches,
los campos de flores, los árboles,
inunda las lagunas y embalses.
Dispersa gotas sobre los cristales de las ventanas,
borra las marcas del suelo de mi casa,
penetra dentro de los muebles.
Miro el cielo y está gris y triste,
escucho el estruendo de las tormentas,
es como si lavara el goce de vivir.
Otra lluvia misteriosa y sin agua
empapa mi alma,
y se moja mi corazón
que en medio de tempestades,
CLAMA AMOR.