Gracias no sería la palabra adecuada
para plasmar en el papel, lo que yo siento
al leer tu acróstico, esposa mía amada
pues es poco, para tan bello pensamiento...
Y te juro mi tesoro, que yo no miento
pues tus letras, si han logrado enternecerme
y robarme todo el amor y el sentimiento
que has dejado en mi alma, al corresponderme...
Nunca antes habían logrado, encenderme
el amor y la pasión, y de esta manera
que a veces me parece, voy a desprenderme
y darte mi corazón, aunque yo me muera...
Porque eres mi razón de existir, la primera
mujer que me ha robado, todos los sentidos
regalándole a mi vida, paz verdadera
devolviéndome el amor, y paz, ya perdidos...
CAZA
31/10/2014