Carlos Fernando

Si me hubieras amado como yo (Una carta de amor y olvido)

 

Si me hubieras amado como yo,

a estas alturas de mi andar

me asomaría a ventanas

que no conoceré.

Compartiría contigo

mis sinsabores y secretos

y verías en mi rostro las risas

que me producen mis logros,

o la sensatez que trae la edad

a fuerza de buscar

diferentes respuestas

para el mismo error,

hasta quedar resuelto el dilema;

con lo cual podemos

abocarnos al siguiente.

Tú me habrías visto envejecer,

y yo a ti. Tus hijos llevarían

mi sangre, y tendrían mi parecido

aunque serían distintos

a los que engendré

en la realidad.

Habríamos salido juntos

de compras y de viaje.

Me habrías atendido

en mis enfermedades y yo

habría estado pendiente de las tuyas.

Habría aprendido a amarte.

Como amé,

como amo y amaré.

Lo sé, porque así ha sido

mi vida al lado de quien me amó

en lugar tuyo.

¡Cuántas cosas nos perdimos!

Cuántas otras pudimos conocer.

Cuántas cosas hemos conocido

cada cual por su camino.

Que seas feliz, como serías conmigo

Como soy yo feliz, sin ti.

 

Carlos Fernando