Cuando estoy en tus brazos, toda mi piel
se enciende como una llama, de pasión
el perfume de tu cuerpo, mi emoción
y el néctar de tus labios, es como miel
Y yo me bebo cual naufrago, sediento
el olor de tu aliento, como jazmines
que me eleva, por los sensuales confines
del placer, mi dulce amada, que yo siento
Y tus brazos, que aprisionan a los míos
aferrados a mi cuerpo, con firmeza
me recorren de los pies a la cabeza
y me llenan su calor, tan dulce y tibios
Y al final, cuando cruzamos ese velo
del amor, que es el placer mas esperado
cuando loco, de pasión, desesperado
en un solo cuerpo, llegamos al cielo...
CAZA
05/11/2014