Hoy les hablo a las madres
pues soy una de ellas,
si su fruto es varón
no deformen su esencia.
permítanle ser, existir y sentir
sin matar su belleza o
avergonzarlos por ella.
Cuando el niño por orden,
de su madre perfecta,
le prohíben y obligan
a matar la tristeza,
se convierte en un hombre
que no tiene nobleza
y a su mujer maltrata
sin piedad y sin pena,
pues de pequeño dijeron
usted es macho, no hembra.
Hay mujeres que tienen
en su casa una bestia
que les pega y ofende
sin ninguna piedad,
yo les digo mujeres
dejen ese animal
de seguro en la vida
les espera un galán
que no tiene por norma
ocultar la verdad
que son seres que sienten
en su corazón bondad.
A los hombres les digo
suelten ya la careta,
no serán mariquitas
por mostrar su nobleza.
Permítanse ser
lo que en el fondo se niegan
“seres maravillosos
de indescriptible belleza”