Como quisiera tener manos de artesano,
Tan bien de escultor,
Con un mazo y un cincel,
Me encanta mirarte cuando empiezo a tallar,
Esculpiré en una roca de mármol,
Ho elaborar el oro en forma artesanal,
Ho transformar un diamante,
En tú cuerpo escultural,
Usar los materiales más nobles,
Como tu corazón, en vuelto en bondad,
Con mis manos callosas, esculpiré tu rostro,
Tus ojos dos luceros, que brillen como el sol,
Con hilos dorados tú cabello,
Tu dentadura de porcelana,
Unos labios escarnecí, tentador como la frutilla,
Cincelar con mis manos envejecidas.
Lentamente, en un diamante,
El resto de tu cuerpo, en un diamante,
Con mis labios puliré el metal,
Con piedras preciosas pondré tu nombre,
Si pudiera escribir en el cielo,
Con fuego, que eres el amor de mi vida,
Porque eres un viento nuevo,
Eres como una vertiente, que calma mi sed,
Déjame decir que solo tú me ases feliz,
Tus besos me dejan sin respirar,
Somos piedras cultivadas en el amor,
Sin poder dormir enloquecí,
La mujer que extraño, alegra mi vida con sabiduría,
Con ternura me acaricia, desde que llego,
Hoy no sé cómo demostrarle el valor,
Desde que me abrazo saco mi dolor,
Hasta el cielo y las estrellas la han nombrado reina,
Y yo con mis besos te corono.
Autor eco del alma
Derechos reservados
Antofagasta, 10-11-2014