Paloma P.P.

LA MANO ARRANCADA

      Una noche de verano murió Matías en un campo oscuro. Nos reunimos todos los vecinos para enterrarle en el cementerio local. Durante el entierro mientras depositamos el cadáver en la tumba se nos rompió la mano derecha y decidimos meterla en la sepultura junto al cuerpo del muerto.

    Al cabo de un mes dicha mano se volvió invisible y escapó del sepulcro de Matías, viajó por toda la comarca sin que nadie la viera. Se introdujo en la casa del alcalde del pueblo Cincinaty y empezó a acariciar la cara de todos los miembros de la familia mientras dormían por la noche, pero nadie se enteraba de nada.

     Un día enfurecida se agarró al cuello de un niño y le estranguló matándole al momento. La familia se encontró el cadáver del niño en el suelo y gritó horrorizada. Otro día rompió los cristales de la ventana del salón y cortó el brazo de la niña mayor, la familia luchó por cortarle la hemorragia con vendajes. Varios días más tarde tiró al suelo un candelabro de 2 velas encendidas, prendió una llama en la alfombra que se transformó en un incendio y la familia horrorizada tuvo que llamar a los bomberos. Los familiares estaban asustados de los hechos acontecidos pero nadie sabía qué pasaba.

     El alcalde y su mujer acudieron a la comisaría de policía para narrar los terroríficos hechos acontecidos días atrás en su casa. Estaban asustados y sorprendidos por el misterio. El inspector jefe se compromete a investigar los hechos. La policía observa y estudia el caso enigmático de la mano arrancada pero nadie observa nada y le confirman a la familia “ Detrás de todos estos hechos acontecidos en vuestra casa que han sembrado muertes y desgracias se oculta un ser misterioso que no localizamos”.