Habitas en mi melancolía
como la raíz en la tierra
que se adentra explotando sus nutrientes,
así me absorbe tu recuerdo
explotando mis ansias de tenerte
en nostálgicos versos y en lamentos.
Tu nombre como un rezo diario
De día y de noche rompo el viento
Pronunciándolo, con el alma acongojada.
Mientras yo más te recuerdo,
tú, más me olvidas
A tal punto que de todo aquello
para ti, ya no queda nada
mientras que yo, vivo suspendida
En el recuerdo de lo que fue mi vida
cuando en tus brazos
de amor me ilusionabas.
Quizás fue eso justamente,
una ilusión mía, nada más,
mientras que para ti, yo, no era nada