Hoy recorrí unos campos;
recorrí mi cama,
mis encantos y mi alma.
Vi que en mi alma,
no hay amor.
No se lo que es la calma,
si lo que es un desamor.
¡Lloré en mi lecho de dolor!
al ver a todos amandosé;
y sola yo sin tu olor,
sola yo sin tu alcance.
Y al verme así sola,
busque otros caminos;
vi que no esta sola,
que estaba llena de amigos.
Me alegre y levante la mirada;
seguí siendo la misma,
y al verme tan calmada,
me ame a mi misma.
Encontré por fin el amor
y tranquila dormiría.
Ya no habría mas dolor,
ya no más ira.
Seguiré siendo la misma,
hasta que yo muera;
dejaré mucha estima,
y no me quedaré fuera...