El verdadero amor
No me placen esas comparaciones
que ninguna de ellas nos da a entender
el verdadero amor. En ti, mujer,
es donde confluyen estas razones.
Al mirarte siento las devociones
que de tus encantos pueden nacer,
porque en este mundo no hay otro ser
que pueda crear tantas ilusiones.
Afecto, estimación apasionada;
cariño se tiene a la bella flor
por la lindeza y ternura mostrada,
que enamorados ven en su color.
De la Creación, Reina apasionada,
sólo tú serás verdadero amor.
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Sin inquietar estilo de poema
sólo sé rimar lo que estoy sintiendo
porque quiero ser lo que sigo siendo
para poder dejar alto mi emblema.
Contigo, mujer, no he de usar la flema
del chusco que por siempre va mintiendo,
al leer tus poemas estoy viendo
enredado el amor en la diadema.
En conjeturas me quedo perplejo
para dar a entender lo que proclamo;
fíjate bien que soy poeta viejo
y del sentimiento sólo reclamo
buena meditación de este consejo:
Que soy un hombre sintiendo que te amo.
Poemas de Camilo*