ALVARO J. MARQUEZ

INDECISO

En las madrugadas estoy despertando menos,
tampoco estoy sintiendo mis ojos tan llenos
de esas lágrimas que solían brotarme por ti.
No sé… será que ya me adapté a mi soledad,
creo que asumo que tu amor no era de verdad
o que no lo merecía, sea tal vez lo que asumí.

La que era nuestra canción no la escucho tanto
y si la oigo ya no existe nostalgia ni la canto…
simplemente la dejo sonar con indiferencia.
No sé… será que me habitué a ver que no estás,
que el aire de tu lejanía cada día sopla más
y me está costando mucho percibir tu esencia.

Siento que mi jardín de nuevo feliz florece
y que al detenerme a ver las flores no aparece
el fantasma del pasado que siempre aparecía.
No sé… será que ya siento menos mi pena,
que he comenzado al fin a sentirte muy ajena
y a la vez a suponer que tal vez no fuiste mía.

El viento que tus palabras hasta mi vera traía
ahora ya no sopla como llegó a soplar un día
y que vuelva a soplar así en verdad lo dudo.
No sé... quizá no ha de pensarlo quien me vea,
pero aunque sea imposible, es posible que crea
que un viento hablador ahora sea viento mudo.

He dejado de visitar los lugares adonde íbamos
las plazas en donde abrazados nos divertíamos
y hasta los pájaros en su vuelo nos sonreían…
No sé… trato de entender lo que ahora me pasa,
será que ya no me gusta tanto salir de mi casa
o que nunca entendí lo que las aves me decían.

Ya no leo aquellos versos que me escribiste,
quizá por no pensar que hubo algo que me diste
o por pensarlo y no querer verlo, ya no sé...
Será que esto fue lo que nuestro destino quiso,
te confieso que me siento un poco indeciso…
y ni sé si voy a olvidarte o es que ya te olvidé.