Es una puesta chiquita
al fondo de la calle.
Allí donde termina la vida
del que vive al día,
contando monedas;
y comienza el sol
que se hace tarde.
Allí donde el sol
se esconde de la noche.
Allí el sol se dice,
aquí no estoy,
aquí me fui.
Y allí,
la puesta del sol
es un loco
que te dice que se va,
que está aburrido,
que está enfermo
y enviciado.
Y allí,
la puesta del sol
es un castigo
por ser tarde,
vecino y amigo.
No pudiste ver la luz,
no seguiste la luz,
volvete lenta oscuridad
que desespera.
Y así un loco triste
se apodera de todo,
se lleva la calle
y estas letras.
Y allí
el sol se pregunta
a dónde se habrá ido
la tarde
y por qué...
por qué
se quedaron
las preguntas.