CORAZÓN LIMPIO

EN EL SILENCIO DE MI HABITACIÓN

Ahora que no escucho voces, con la luz bajita y todos dormidos.

Me dirijo a mí habitación, estoy cansada fue un día pesado.

Pero ya tránquila, en pijama y recién bañada me siento en mi cama.

Extiendo la sábana, blanca y acomodo mi almohada,

me dispongo a descansar.

Hace calor, me levanto y me quito el pijama y mi ropa interior,

el sostén negro y la pántaleta támbien.

Le pongo el seguro a la puerta, así no entrará nadíe

y no pasaré ninguna vergüenza, con los pequeños.

Me cubro solamente mis pechos y mi intimidad, ¡¡mnn!!

Que delicía, me fascina sentír la frescura de la sábana en mi piel.

Por fin me estoy quedando dormida, y empiezo a acordarme de ti.

Te imagino que llegas y me descubres, me acaricías, y excitas.

Terminamos haciendo el amor y ya cansados, satisfechos los dos.

Nos quedamos dormidos hasta el amanecer, me abrazo a ti y

te siento tan suave, que te aprieto más y cuando busco tu rostro,

para besarte, solamente está mi almohada.

Fue un sueño, tú no estábas conmigo, solo el silencio de mi habitación.