El sol sale para todos...menos para el marido flaco, de una señora gorda que está a su lado.
El rocío tal vez, sean las lágrimas de tantos y tantos amantes...que sufrieron amando.
Que dolor tan grande, el de las aguas que arrastra el arroyo, pasan por tantos lugares lindos...y no pueden parar en ninguno.
Hay alguien que va tan aprisa, que se olvida de volver...”el tiempo”
Los sueños son los únicos vehículos, que nos pueden transportar donde nos gustaría estar, solamente debernos subirnos a ellos, poner primera...y partir.
Si quieres llegar al cielo, no olvides que los trámites debes hacerlos aquí...en la tierra.
Si tuviese el don de prohibir algo, prohibiría los sueños...con gusto a fracasos.
Es inútil, cuanto más te alejes de mi, más cerca estarás...de mis ganas de verte.
La única calle que termina en un precipicio…es la del autoritarismo.
Boris Gold
(simplemente…un poeta)