Cuando me haces caricias, caricias prohibidas.
Capaces de mover montes y colinas.
Que encienden mi cuerpo y casi sin ganas
Transportan mi alma a un mundo de cuentos.
Caricias que me hacen olvidar el tiempo.
Y volar, y volar cual si fuera hoja al viento.
Y estalla el volcán que llevo por dentro.
Y sobre tu pecho descanso en silencio.
Cuando despierto, veo que era un sueño.
Son ansias que tengo, de verte de nuevo.