Renuncié a ti,
a tu sonrisa,a tu mirada,
renuncié a la felicidad
de sentirme amada.
Renuncié a tus caricias
y a los mutuos suspiros,
renuncié a ese momento
que me dijiste...soy tuyo...
¿Y todo por qué...?
porque mi corazón dormido
ha sufrido heridas
que no logra curar.
porque pienso que no soy capaz
de volver a sentir ese calor
que queme mi alma y me deje volar...
He renunciado a ti,
quizá algún día te lo pueda explicar,
quizá ni yo misma
encuentre una respuesta.
Te llegué a amar más
de lo que puedas imaginar,
más de lo que mi corazón ansíaba,
pero en mí vive un invierno permanente
que me impide volver a soñar.
He renunciado a ti,
a tu piel caliente
y tus besos ardientes,
a ese placer de sentirme tuya
traspasando los limites
de la ensoñación.
Renuncié a ti,
por todo lo que soy,
porque quizá después,
pasado un tiempo
te arrepientas de sentir
por mí toda esa pasión,
porque no merezco tu amor.
He renunciado a ti,
anhelando con mi corazón
el saberte feliz
aunque sea alejado de mí.
YOLANDA BARRY.