Mirinda

Como sombra de luz

Ella amaneció con los ojos lejanos,

como encantada con sonidos del silencio,

el viento arrebato su mente y la llevo lejos.

Él la miraba turbado, con ojos incrédulos.

El medico decía, que tal vez, con el tiempo…

Él quería retenerla, rescatarla, creaba lazos,

Le hablaba de amor, de los hijos, de futuros nietos.

Ella por instantes, quería escucharlo, parecía verlo,

pero el olvido la atrapaba una y otra vez,

cada vez más seguido, la alejaba en el tiempo.

El tejía esperanzas, moría por escuchar su voz,

pero ella se perdía  en un abismo.

El vacío brotaba de su boca en silencio

Él empezó a amar hasta su ausencia

Ella se perdió en un laberinto inalcanzable.

Él la cuida y vive solo por y para ella…

Desfiladero de silencios rodean su tiempo

Él acaricia su imagen y como sombra de luz

Camina a su lado, esperando un despertar.

Mientras el viento le susurra preciosos recuerdos.