Hugo Emilio Ocanto

Esa presencia - Poema - (Jueves del amor y del dolor)

La que siempre

tendría que estar.

La que extraño.

La que a veces

a un lado dejo.

Pero no creas es así.

Aunque no te nombre

en letras.

Te llevo grabado

en mi corazón,

todos los días

de mi vida.

Desde que

me enseñaron

a comprenderte

y amarte.

Esa, tu presencia,

siempre en mí está.

Porque es la que

le da a mi vida,

los deseos de vivir,

aunque muchas veces

he querido dejar de existir.

Tu imaginaria voz,

es la que me

ha hecho desistir

de la cobardía

de vivir.

Pero sabes

que en mí,

son locas ideas,

que no he de cumplir.

¿Cómo dejar de vivir,

si Tú eres

el gran bálsamo

de mi existencia...?,

para continuarla,

y continuarla,

aunque tenga que sufrir.

Ya no me importa.

Sufro, pero con alegría,

con amor, porque

a través de tus palabras,

cada día voy comprendiendo,

y comprendiéndote.

Mi sufrimiento

no puede compararse

al que Tú has tenido.

Y en más de una oportunidad,

he aspirado el aroma

de tu sangre.

Y la he llorado,

la he amado.

¡Cómo no amarte,

si Tú entregaste

tu vida

por nosotros!

El dolor de

no poder verte,

así, en carne y hueso,

pero sentir en mí,

el gran amor

que siento por Ti.

Amarte es parte de mi existencia.

Ante los sufrimientos,

el estar consciente

que te amo,

y Tú me amas,

soy feliz,

aunque tenga

que sufrir

el más terrible

dolor de la vida.

Derechos reservados de autor (Hugo Emilio Ocanto -  04/12/2014)