Para Ángela
Hola,
Te llame,
Te escribí,
Te busque aún bajo la lluvia,
Dejándome llevar por el aroma de tu cabello,
E imagine una luz que abriera los caminos,
Y me mostrara tus pasos;
Regresaba por sobre tus huellas,
Pretendiendo ser tu sombra,
Y quizás hasta tu alma…
Pero al no hallarte,
Me senté bajo la lluvia,
Para confundir mis lágrimas,
Con las lágrimas del cielo,
Y disimuladamente… morir de pena,
Morir de pena al no volver a oír ni a ver,
Ni a sentir el dulce aroma,
De tus cabellos sobre tu piel,
Tu piel,
Que fuera mía.
Hoy me quede dormido,
Sintiendo lágrimas del cielo
Caer sobre mi rostro…
Triste y amanecido.