Las estaciones,
así como tu llamado al pensamiento,
siempre llegan a tiempo,
en medio de las visiones
de una mañana serrada.
la madrugada hace recuento
enarbolado de los recuerdos
avocados a ti;
casi parece que pierdo el foco,
que mi poesía no da brillo
y mi afán de repetir que te extraño
solo gasta la frase,
y aviva verdades.
después de todo la única
verdad existe en nuestra conciencia,
ante un océano abismal de escombros,
de palabras enlistadas en diarios
y archivadores llenos de poesía;
un océano abismal que te separa de mi
y me separa de la realidad.
el cuadro de tu mirada
es tan nítido que puedo tocarlo,
percibo el perfume
que pinta el color de tus ojos
cuando rozo el solúble
concepto de verte en mis brazos
nuevamente, sin contar con chismes
austeros de solemnidad
o grillos que adornen la noche sin elementos.
En fin, mi anhelo gira en torno
a la esperanza de verte de nuevo.
Quizá las gardenias no se deshojen
ante una primavera anticipada,
el viento no dejará de soplar,
pero apelo al deshielo de tu amor,
que calidezca y abrace
el corazón que tanto mendiga
verte de cerca,
como era en principio,
simple y sencillo,
sin complejos desmeritados,
como si fuéramos niños.
Tantos son los días
que llenan la cúspide de la sapiencia;
tanto se ha repetido la concepción
expedita del pensamiento de:
¿qué llena este abismo entre nosotros?;
tanto me repito lo mismo:
\"es espacio sin aire, sin respiro\";
tanto me repites lo mismo:
\"es mi espacio, con aire y respiro\".
pero al final de tantos días coleccionados:
¿que llena éste abismo?
poesía, palabras, mentiras,
ese océano lleno de cosas impertinentes,
o solo son tus pies descalzos,
que austéntan indeterminadamente
ir un paso a la vez,
mas cerca de la luna
y mas lejos de mi.
no lo sé, lo pregunto
pero no me dicen tampoco,
ni me dices tampoco.
quizá porque si me lo dices
muy probablemente te creería;
que me quieres lejos,
que no me quieres,
que si me quieres
pero no encajamos en contexto,
que nunca me quisiste,
que me quisiste demasiado para creerlo,
o sencillamente...
que me querías pero ya no,
porque los sueños atenuaron solos,
porque en la distancia el amor se apagó.
te amo Violeta
y la distancia me está matando.
te extraño.
Ne m\'oubliez pas
Je ne le sera jamais