Las entrañas se revuelven,
La intranquilidad se asienta
Y, como casi siempre ocurre,
No hay quien lo comprenda.
Meditando, aún a pesar de la logica voluntad,
Pensando en toda hora y lugar,
Se atisban incomodidades
Que permiten explicar.
En el amor, todo vale,
Y el dolor forma parte integra del mismo;
Pero en la amistad o lo laboral,
No todo tiene que considerarse,
Perdonar y menos olvidar.
La entrega profesional,
Generalmente mal entendida;
El denuedo sin fin,
La intención y unión por colaborar;
Aspectos que me hacen preguntar,
? Para que al fin?,
? Por que actuar así?
La respuesta es sencilla,
Así soy yo!,
y no me puedo cambiar (no se sí quiero).
Y a cambio, siempre una nueva decepción:
El protagonismo mal entendido,
Los temores de los
mediocres,
Las funciones mal definidas
Y las conveniencias e intereses,
Definen y explican un actitud
Que si no irracional,
si demuestran la inexistencia de mi concepto de amistad y lealtad.
Y ahí, como ríachuelo que nace en perdida montaña,
Se genera una nueva decepción,
Difícil de gestionar,
de sobrellevar en el diario caminar.
Hagase la voluntad de los intereses comerciales,
Aquí en la tierra, como en cualquier lugar.
Disculpa mis equivocaciones,
Y permite que mis sueños,
Mis utópicas ilusiones,
No abandonen mi ser,
Me den la fuerza y alegría
Sin la que la vida no tiene sentido.
Te ruego que,
Sabiendo de la dificultad,
Atiendas mi súplica
Y encuentre al fin ese espacio
Con el que en armonía convivir.
Amén!