Cual polvo sideral la vida mía boga,
sin saber a dónde va,
entre los espacios del tiempo.
Partir la miro como brizna ondeando al viento.
su tenue imagen,
despréndese de la tierra,
perdiéndose en la vasta lobreguez,
del olvido
Otras veces
Sin permiso pedir, silente se escabulle,
entre las grietas del existir.
Soñando llegar quizá,
al paraíso de la negación.
Tal vez.
A la orilla de lo desconocido.
Ahora, que la vida mía,
Se ha gastado las horas de su existencia.
Que del polvo de otros mundos
Se formó.
Antes de desvanecerse en la nada.
evocando tiempos idos.
No resistieron los encantos del vivir.
El espíritu se me ha gastado
Las horas del reloj sin remedio escapan.
se van… se van... se van.
bambam