Eso es lo que eres.
Mi todo… en la vida.
Tantas satisfacciones
me ha brindado la vida.
Pero en realidad,
eres mi verdadero tesoro.
Si te perdiese,
con nada me quedaría.
Por eso es que
debo cuidarte.
Te dedico estas palabras
porque Dios ha permitido,
te integres a mi existencia.
Toda tú, mi amor,
eres mi todo.
Te lo digo,
una y otra vez,
porque quiero
que siempre
lo tengas presente.
Te amo con toda la pasión
de mi corazón.
Derechos reservados de autor( Hugo Emilio Ocanto - 09/12/2014)