Nunca te traté mal,
y lo hiciste tú conmigo.
Me alejaste,
en dosis todo se murió.
Del uno al cien
no superas el cero.
Le prendí velas a Dios
pidiendo por un milagro,
pero mi amor no es de acero.
No cuidaste de mí,
creció más,
tu falta de atención.
Se te acabó la excusa,
rompiste la ilusión,
soy mucho para ti.
Mucho para tan poco,
yo te di demasiado,
pobre mi corazón.