Tanto he querido esta vida que estoy dispuesto a volver,
A renunciar al placer de la tierra prometida;
No hay mejor gloria que dar de nosotros lo mejor
Por ese mentado amor que nada quiere esperar,
Tanto vale la amistad, tanto unos labios de seda,
Tanto una ansiedad primera como un honesto llorar;
Que estoy dispuesto a seguir sin importarme el dolor,
Busco como todo sol sólo la luz compartir;
Tanto valoro el cariño de tan honesta amistad
Tanto el hallar la verdad en la sonrisa de un niño;
En la abnegación sin par de una madre que te brinda
Esa caricia tan linda cuando te quiere curar;
Conclusión, quiero seguir al lado de mis hermanos,
Seguir tomando sus manos con emoción infantil;
Expresar sólo ternura por toda una eternidad
Donde yo pueda expresar como siempre mis locuras…