Serás como la luna que nada la oscurece,
Tú serás la ternura y la luz,
Alumbras hasta lo más profundo del mar,
Entra en mí para que alumbres mi corazón,
Queda te en mi vida a un que me agás temblar,
Si no te encuentro cerca de mí,
No sé qué me pasara ni Dios me entenderá,
Si no estás se me quemará el alma,
No tendría más que vivir de fantasía,
Sabes que despierto cada madrugada,
Pensando el instante en que fuiste mía,
Bendito tu cuerpo que lo llene de caricias,
No dejo de olfatear tu perfume mágico,
La distancia no será nada para nuestro amor,
Se enloquecieron mis ojos al verte,
Se apodero el suspenso,
Donde creció el deseo de tenerte,
Algo ardía a aquí dentro,
Algo tan intenso sin explicación,
Buenas noches después de amarte,
Mi corazón no tendrá ni una dueña más,
Cambia tu mirada que me inquieta el cuerpo,
Late más fuerte mi corazón,
Pienso que las noches no fueron inútiles,
Que la pasión nos llevó a la lujuria,
Cuando nos mirábamos desnudo,
Nos abrasábamos el rose de nuestra piel,
Encendía la llama que se volvió en un infierno,
Es verdad que no tengo palabras,
Para expresarme bien,
Pero te quiero tanto que el mundo,
Comprenderá nuestra forma de amar,
He pensado mil cosas para no quererte,
Mi cuerpo te extraña tu piel,
Mi alma no te deja de querer,
Y mi corazón te extraña al no tenerte cerca,
Todo aria hasta mi cuerpo pedazos,
Te necesito tanto como el aire para respirar,
Romperé mi corazón si tú te vas,
El dolor me destruirá,
Solo estoy pensando en nuestro amor,
Te sabré querer hasta la eternidad,
Para amarte,
Solo quiero estar en el mar,
Del amor dentro de tu corazón,
Me enseñaste aprender a usar el olfato,
Por qué el perfume de tu cuerpo,
Des pues de hacer el amor,
Quedo en mis narices,
Que no lo puedo perder,
No digas nadas, calla tu boca,
Con mis labios, en pápelos de amor y deseo,
No dejemos que el tiempo,
Se valla entre los dedos,
Mientras vemos caer la lluvia,
Tú siempre tú la que me llena de pasión,
La que me enamore estando legos,
Pero su corazón cerca de mí,
La que me espera,
Tras la frontera sin importar las banderas,
Por qué el amor es libre y no tiene trincheras,
Cuando asemos el amor,
Seme abren los poros del cuerpo,
Es cuando al cansamos el cielo,
Somos tú y yo que vemos las estrellas,
Tapando nuestros cuerpos,
Como si fueran pétalos de rosas,
Que cubren nuestra ansiedad,
De amar.
Autor eco del alma
Derechos reservados
Antofagasta, 09 12, 2014