Trajo en sus brazos la vida
cargo en hombros la muerte,
siendo aun inocente
culpable fue declarado.
Con negros clavos colgaron
su cuerpo en el calvario,
así se libraba el hombre
de su pena y de su agravio.
Contado entre los mortales,
su tumba ya no lo encierra
lo que de otros ya es tierra
para el no hay corrupción.
Hoy reina en una mansión
como supremo monarca,
pronto volverá al mundo
para cumplir su palabra.
Que debe hacer el humano
para alcanzar la promesa,
de llegar a canaan
donde la vida comienza.
Vasta con amar al verbo
que habito entre nosotros
y con prodigios grandioso
las puertas del cielo abrió.
Entregarle el corazón
es el mayor portento,
que los hombres de talento
le darán al creador.
Cada día en su honor
mi vida le entregare,
guiada por su amor
a su reino llegare.
Allí yo disfrutare
cosas que ojo no vio,
junto al amado de Dios
viviré eternamente.
Si te parece atrayente,
lo que te ofrece Jesús,
acercarte hoy a la cruz
que todavía hay lugar.
No lo dejes para luego,
mañana tal ves sea tarde,
hoy es el día especial
deja que Señor te hable.