A ojos de buey
la rosa de los vientos
siembra la diàspora.
Entre mar y cielo intuye el niño
lo que es ignorar.
Le pregunta al viento
¿Donde està el pinar?
Navega rumbo al horizonte
hacia el infinito del mar,
y ante el altar de nubes fugitivas
ya entiende lo que es llorar.
Retumba una canciòn inmensa
la silba el viento en el pinar.
¡Ay, ay quien pudiera
la canciòn del viento olvidar¡