kavanarudén

Anhelante

 

 

 

Te toco con mis manos.

Trato de hablar contigo y me das la espalda.

Solo quieres que te sienta, que te sufra, que te toque.

Duro este destierro, que desgarra el alma.

Quiero extender mis alas y volar al infinito.

Perderme en el cielo inmenso y no regresar jamás.

Ir, ir, ir…

Subir, subir, subir…

Perderme, solo perderme…

Fundirme con la luz del sol.

Ser lluvia que empapa la tierra reseca.

Ser rocío matinal que acaricia la rosa.

Ser bruma mañanera que abriga el valle.

Ser vuelo sereno de un ave migratoria.

Ser el último suspiro de un alma enamorada.

Ser vapor que se eleva sereno, desplegándose.

Dulces barras de diamantes que encierran mi ser.

Ansias candentes de libertad.

En el silencio oscuro de la noche, escucho el gotear del tiempo,

acompañado con el doloroso latir de mi corazón.

Quietud silente, quietud estridente, quietud inclemente.

Respirar profundo, suspiro intenso.

Tómame en tus brazos, Morfeo y no me abandones jamás.

No permites que el cruel despertar me traiga de nuevo.

Llévame lejano a tu mundo de fantasías etéreas, donde reina la no existencia,

el tiempo sin tiempo, el espacio sin espacio, lo simplemente eterno…..