Es extraña esta obsesión que en mi habita
y a sus anchas campa por mi ser,
remueve mis entrañas a capricho
y provoca sentimientos a placer.
Sueño continuamente contigo,
no abandonas mi mente ni un instante,
acaricias mis deseos mas profundos
alejándote después, distante.
Temo entregarme totalmente,
temo perderte si no procedo,
temo decir lo que siento,
temo querer lo que quiero.
¿Y que mas da si no se qué deseo?
Si mi mente te rechaza,
mientras mi alma te reclama
y mi corazón rompe su coraza.
¡Que indefensa y desvalida
ante tal amalgama de sentires!
Porque solo con una palabra
sería tuya si lo decides.