El tiempo siguen pasando, tus recuerdos dejan mella,
y me sigo emocionando,en estas perspectivas bellas,
miro estos avellanos,siento que quieren llegar al cielo,
y los comparo conmigo,junto a este amor de ensueño,
me refugio en este río a veces, cuando no te hallo a ti,
y le cuento de nuestras cosas y lo que me haces sentir,
sentado en esta orilla en paz,me ilusiono y suelo llorar,
y le digo al río cuanto te añoro,y que te amo de verdad,
oigo el murmullo de la corriente,e imagino que es tu voz,
me dices cuanto me quieres y que siempre seré tu amor,
aquí sentado en esta orilla,siento de tu corazón el dueño,
y fabrico mil cuentos bellos,basados todos en tus sueños,
y entre tanto esos avellanos, alcanzan al cielo creciendo,
tal cual como mi pecho por ti, sigue latiendo y viviendo,
¡querría ser yo así en la vida como ese inmenso avellano,
y que este amor por ti, siempre lo alcanzaran mis manos!,
no querría nunca en esta vida, ser esclavo ni ser dueño,
aunque el destino ha querido,que tu me quites el sueño,
me has convertido en esclavo, de tus gustos y manías,
y así me encuentro desvelado, en mis noches y tus días,
querría en tu honor cumplir con todas estas añoranzas,
sentir mi corazón latiendo, con el compás de tu mirada,
hacer de este lugar templo,asentar bandera en tu plaza,
remontar contigo el vuelo,alumbrar si hay luz atenuada,
y subiendo y subiendo, hasta alcanzar infinito el cielo,
tocar las nubes con las manos, sentir mio el universo,
contigo este amor sintiendo,pues si así no siento muero,
y a bien seguro entendiendo forjaría mi ser:
UN INFIERNO