Agatha Amelia

Un corazón enamorado

No tengo palabra alguna para toda

esta inefable tristeza que me abraza;

las siniestras sobras que estaban ocultas

en algún rincón de mi mente, hoy, se escapan

y me torturan con incansables trampas

que a mi corazón lo matan.

 

Trato de controlar estas incesantes lágrimas

que hacen de cristal mis ojos, se quiebran por un recuerdo

y nadan muy lejos hasta dejar húmeda mi almohada.

Pero espero que lo que hayas escogido, sea mejor que

lo que has dejado destrozado: un corazón enamorado.