Raúl Daniel

Sembré rosas en el desierto (Espejo 39)

 

Sembré rosas en el desierto,

planté árboles en el mar,

eché mis semillas al viento

y me senté a esperar...

 

Hice plegarias por los que me agredieron

y en el hueco de la mano que me castigaba

puse pan...

luego me quedé quieto

y guardé silencio,

(cuando hago silencio,

Dios me suele hablar).

 

Duermo tranquilo, descanso en paz,

y, en la mañana, cuando despierto,

¡siempre!, alguien me llama a desayunar.