Nicolas Ferreira Lamaita

SENCILLAS VERDADES DE LA VIDA.

 

Aburrido estaba, me di a la tarea
revolver mi archivo de cosas juntadas
otras por mi escritas y por que no decirlo
creo la mayoría, deben ser robadas.
robadas por buenas, no por que sean malas.
Recuerdo quejarme porque tenía que ir a la escuela
quejarme de mis maestros, que enérgicos y pacientes
abrieron mi mente y la llenaron de fe y esperanza, 
nuevos y ricos conocimientos y sobre todo la confianza.

Quiero volver a confiar

Fui criado con principios morales comunes, 
cuando era niño, madres, padres, maestros,
profesores, abuelos, tíos, vecinos, eran autoridades 
dignas de respeto y consideración.
Cuanto más próximos o más viejos, 
más afecto nos dieron. 
Era inimaginable responder mal educadamente 
a los más ancianos, a maestros o autoridades,
Mi padre, con solo tercer año de escuela, me decía:
“La escuela es tu segundo hogar y los maestros
tus segundos padres”, si te ganas un rezongo,
te rezongare dos veces, si te tiran de una oreja,
te tirare las dos, será que nada bueno hiciste.
Hoy, a mis ochenta y un años recuerdo esas palabras.
HABÍA RESPETO.
Confiábamos en los adultos porque todos eran padres, 
madres o familiares de todos los chicos de la cuadra, 
del barrio, de la ciudad.
Teníamos miedo apenas de lo oscuro, 
de los sapos, ratones, o películas de terror.
Hoy tengo una tristeza infinita por todo lo que hemos perdido. 
Por todo lo que mis nietos un día temerán.
Por el miedo en la mirada de los niños, 
jóvenes, viejos y adultos.
¿Derechos humanos para criminales?
¿Deberes ilimitados para ciudadanos honestos?
¿Pagar las deudas es ser tonto?
¿Amnistía para los estafadores?
¿Los honestos son pendejos?
¿No tomar ventaja es ser necio?
¿Qué pasó con nosotros?
Profesores maltratados en las aulas, 
comerciantes amenazados por traficantes, 
rejas en nuestras ventanas y puertas.
Rejas altas en los muros de nuestras casas. 
Cada uno encerrado en su mundo.
¿QUE VALORES SON ESTOS?
Autos que valen más que abrazos, 
hijos queriendo regalos por pasar de curso. 
Celulares en las mochilas de los recién salidos de los pañales.
¿Qué vas a querer a cambio de un abrazo?
Más vale un Armani que un diploma.
Más vale una pantalla gigante que una conversación.
Más vale un caro maquillaje que un helado.
Más vale parecer .. que ser.
¿CUANDO FUE QUE TODO ESTO 
DESAPARECIÓ O SE HIZO RIDÍCULO?
Quiero sacar las rejas de mi ventana 
para tocas las flores.
Quiero sentarme en la vereda a tomar mate,
O charlar con un vecino, ver jugar niños en la acera,
y tener la puerta abierta en las noches de verano.
Quiero la honestidad como motivo de orgullo.
Quiero la rectitud de carácter, 
la cara limpia y la mirada a los ojos.
Quiero la vergüenza, y la solidaridad.
Quiero la esperanza, la alegría, la confianza, la fe.
Quiero callarle la boca a quien dice: 
\"a nivel de\", al hablar de una persona.
Abajo el \"TENER\", ¡Viva el \"SER\"!
Y viva el retorno de la verdadera vida, 
simple como la lluvia, limpia como un cielo de abril, 
leve como la brisa de la mañana! 
Y definitivamente común, como yo.
Adoro mi mundo simple y común.
Tener el amor, la caridad, la solidaridad como base. 
La indignación delante de la falta de ética, 
de moral, de respeto...
Vamos a volver a ser \"gente\"
Construir un mundo mejor, más justo, 
donde las personas respeten a las personas.
¿Utopía? ¿No...?... ¿Si?
¿Quién sabe?...
Hagamos el intento...

Nota: Lo escrito cuando es mío, lo firmo.
Al revolver mi archivo, encuentro cosas
que me hacen dudar, pero de cualquier
manera lo siento mío. Y si no es de mi 
autoria pido disculpas, pero al escribirlo,
siento me pertenece y si alguien lo leyere
y esta de acuerdo, que se lo quede.