Benjamín Nicolás

Canicas

 

 Por las noches se escuchan

canicas que retumban, chocan

en el suelo frío y pálido

evocan su último y eterno hálito

 

Solamente jugaba en su lecho

Pasivo, con sus canicas

Oh! Tendría al menos el derecho

de ir por su corto sendero

Temblorosa voz suplica

al maniático ebrio estrecho

sin compasión, impuro

acomete el padre demente

Oh! destino cruel y duro

pobre espíritu silente

 

Ángel que no descansa

triste, como sombra inerte

frágil, yace buscando vida

entre posas y calles sin salida

 

Solo está buscando sus alas

para ser libre como un ruiseñor

quiere guiar a las almas malvadas

hacia el perfume de una blanca flor