Eco del alma

NO SE QUE HACER

Quisiera conocer el secreto de nacer,

Ser un científico,

Para escudriñar el fondo,

O el principio de la vida,

Siento dolores de cabeza,

Pensando cómo hacerlo,

Para echar mi vida al desperdicio,

Y empezar de nuevo,

Sin la inocencia de un niño,

O en una confusión de mentiras,

O caricias con garras de fieras,

Que quieren despedazarte,

Sin conocer a nadie ni conocer su idioma,

Sin saber si son bendiciones o maldiciones,

Las que te desean,

No distingo con mis ojos,

Sus rostros y menos sus corazones,

Para conocer sus malas intenciones,

Muchos tienen hermosas expresiones,

Y alago sobre el recién nacido,

Pero no sale de los labios afuera,

Solo que dan entre los dientes,

Si dejar de lado si fue deseado o no,

El mayor de los deseos que fuera abortado,

Ho dejado en un basural,

Como des pojo de la vida,

Sin decidir si quería vivir o no,

Como conocer el pensamiento,

Antes que se forme el cerebelo,

Para borrar las malas intenciones,

Y dejar una mente sana,

Y del cuerpo apartar los dolores,

Como empezar de nuevo,

La gente pasa y lo que ve leda igual,

Porque en ellos abunda la indiferencia,

Y el amor se convirtió en mentiras,

Tal vez es un error pensar en mirar todo con armonía,

Quisiera en mi vida abrir un diario nuevo,

Dejando borrado lo malvado y lo cruel,

Llevo en mi mochila mis penas y mis desdichas,

Las sacaría de mi vida o mi destino,

Tener una bonita mañana,

Sin cometer los errores pasados,

Para no tener temor a las miradas,

Ho volver a nacer en un mundo equivocado,

Por qué me duele a ver llegado,

Hoy es pequeño el tiempo para arrepentirme,

Cada dio siento que voy cayendo a un abismo,

A parte de mí no te enamores,

Menos te agás ilusiones,

De que nazi sufrí mentiras hasta que ame,

Quisiera que esta noche,

Se apagaran las estrellas,

Y se apague la luna,

El sol no brille más para mí,

Sé que acumulado tantos años,

Fue como un viaje el vivir y nada más,

Solo he vivido en la nada,

La gente me pregunta dónde estabas,

Que no he sabido nada de ti,

Solo mis cuatro paredes,

Son las que me comprenden,

Donde con tristeza escucho la lluvia,

Yo me avía con formado,

Con la vida que estoy acabando,

Pero que hoy se ahecho tarde,

Donde estoy tranquilo y triste,

No fui un gran científico para cambiar los genes,

Ni tampoco un in ventor,

Me quedo con lo que me tocó,

Hasta que me lleve Dios.

 

 

 

 

 

Autor eco del alma

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Antofagasta, 13, 12, 2014