Que renazca en las almas la esperanza y eleve su vuelo para surcar el cielo.
Que no falte el pan compartido como prueba del regalo más bello que recibimos todos los seres con el Nacimiento del niño Jesús: EL AMOR
Y que ese amor al prójimo, cada día, nos haga ser más solidarios.
Que basemos nuestra vida en el respeto y la comprensión hacia todas las criaturas.
Que estemos dispuestos a perdonar a los otros y a nosotros mismos, porque el peso del rencor hace más difícil transitar el camino.
Yo brindaré esta noche por todos ustedes y por que después de tantos obstáculos y pruebas que nos toca enfrentar, seamos capaces de ofrecer como regalo el corazón.
¡FELIZ NAVIDAD Y GRACIAS POR COMPARTIR DÍA A DÍA MIS SUEÑOS!