El descomienzo
Liliana Savoia
El descenso de la tarde
se consume entre minúsculas luminiscencias,
avanzan,
como, pimpollos clandestinos
que se suben
a las veredas pastosas,
desafiando corceles de nubes inaccesibles
El cielo es una fiesta azul marino.
los cristales de las casas se desmayan
consumidos de sudor
por la espalda de las paredes
Desde el comienzo de las oscuridades
la rendición de unas manos
se doblegan
bajo el polvo del ambiente,
La casa es puro redoble de silencio,
ni arcángeles
ni demonios se agitan,
ni la mujer solitaria
se inmuta bajolos alaridos de la noche,
que suenan resistentes.
No esperen estampidas,
ni molestas bocinas,
porque esta noche, en esta ciudad,
tan lejana como el pasado
se instala el descomienzo.
Liliana Savoia
http://savoialola.wix.com/savoia--escritora