Beso la aurora
olvidada,
ante tanta algarabía…
Si pudiera abrazar
y juntar por momentos
amigos con enemigos,
lo hago.
Si puedo llevar
amor a los ancianos
quedados y olvidados,
lo hago.
Si mi orgullo y estridencias
pudiera trocarlas por actitudes
humildes y compasivas,
lo hago.
Si mi férrea política
hiere a las gentes…
moderarla, sin dudar
lo hago.
Si mi sangre sirve
para sanar enfermos
y aliviar sus dolores,
lo hago.
Si la paz que con años
al fin he logrado,
la requieren otros
para vivir en armonías,
sin vacilar
lo hago.
Si hay gentes
cuya escasez obliga
a privarse de alimentos,
gustoso, compartir mi pan
lo hago.
Solo así,
a todos los que hoy día
de una u otra forma vea,
los miraré de frente
y con voz clara y firme
les diré:
¡Feliz año nuevo!.
Fernando de Lira.