Has dejado un atajo de luminosos amores
al compás de tu deliciosa sonrisa muy llena
de dulces fragancias impregnada en tus labios rojos
para darme las quimeras envueltas con tus besos.
Pretendo seguirte hasta que fallezca la noche
sin perder los movimientos enaltecedores y suaves
de esos labios carnosos que encienden mi boca
de pasión y delineando tu bella figura con olor canela.
El cielo refracta con sus estrellas luminosas conformando la foto
instantánea llevada al paraíso de nuestro amor
a tu elegante figura de mujer tierna y bella para
calmarme con el más dulce néctar del oasis de tu boca.
RIVAS JOSE