Desde pequeña habían ocasiones,
en que ni se mencionaba a santa
solamente el nacimiento del niño Dios.
El día 6 de Enero era, el de los tres reyes,
que le traían presentes a él.
Pocas veces llego santa,
pero cuando se podía los reyes nos dejaban dulces
y a veces un regalo.
Al crecer y saber que onda con la realidad de las cosas.
Al ser madre y querer que mis hijos fueran felices.
Simplemente les decía a mis hijos,
a veces no puede llegar santa,
tengan en cuenta que hay muchos niños pobres
si llega Santa compartirán sus juguetes.
Pero los reyes siempre llegaran.
Mi hija la menor cumplió 21 años
tiene apenas 5 de entender la verdad,
de la verdad trabajas y llegan,
no hay dinero no hay regalos.
Esa es tristemente la verdad,
que cómo adultos y padres les retenemos,
haciendo que reciban la visita de los reyes magos.
Mis respetos para las ideas y costumbres
o para los hechos comprobados.
Pero yo si creo en los milagros,
a fe en lo que uno tenga,
es realmente el milagro,
mucho depende de la nobleza,
con que nos expresemos,
lo que hagamos cómo padres
para que la felicidad,
de nuestros hijos se alargue o sea corta.
Mi esposo era intransigente
y si por el hubiera sido desde
pequeños se les hubiese dicho a nuestros
hijos que no existían ni santa ni los reyes.
Que somos los padres quienes compramos
las cosas y los juguetes.
Las patrañas cómo las mencionan,
y llaman algunas personas, han hecho felices,
siguen haciendo felices a miles de niños,
en mí país.
No se en los demás, pero lo único que,
me gusta es ver el noticiero el día 5 y 6 de Enero,
con las imágenes de niños descalzos,
y pobres recibiendo juguetes,
con una sonrisa.
Que me sacan las lágrimas inmediatamente
pero no me importa y los veo,
me palpita el corazón aceleradamente
y entonces mi rostro húmedo,
esboza una enorme sonrisa cómo la de ellos.
Es magnifico e inigualable.
CORAZON LIMPIO
Mty. N.L.MÉXICO