Me fuí de pesca
nueve de la noche
no sé cuantas millas navegamos
el maquinista le contó al capitán
tenemos que regresar
porque la máquina está calentando
llegamos a puerto
todo el personal a casa
y llegué a la mía
y mi amada no estaba
tomé mi teléfono
y le hice una llamada
ella dijo espérame
que estoy en una farmacia
que sínica ella
cómo tambaleaba de borracha
entra y muy de mañana
quiero que te vayas
para que sigas
consumiendo remedio de esa farmacia
porque en la alcoba no te necesito
ni me harás falta.