Marlene E. M.

Jamás podré olvidar

Jamás podría olvidar todo aquello que sentí
desde el día que el destino me llevó hacia ti,
una desconocida sensación dominó mi existir,
inmersa en tu mundo súbitamente yo me ví.

Una indómita pasión se apoderó de mi razón,
jamás con tal vehemencia sentí latir el corazón,
en un instante lo más bello de la vida descubrí,
el surgir del amor por sorpresa tomó mi vivir.

Dicha más inmensa no logra mi mente evocar
que aquellos momentos que a tu lado vi pasar,
insuficiente me parece la misma eternidad
para retribuir cada glorioso instante de felicidad.

Nunca, aunque tratara, podría en el mundo hallar
hermosura tan intensa que a la tuya se logre comparar,
ni de mil estrellas el perpetuo brillo y esplendor
al de la belleza de tu mirar se podrá jamás asemejar.

Incesante el tiempo podrá en la vida transcurrir,
una y mil veces podrá la realidad cambiar;
mas esta llama en mi alma por siempre ha de brillar;
apasionadamente sólo a ti, eternamente, te he de amar.