Hoy no despierto, dormido entre alhelíes,
Ni bajo sombra de roble envejecido,
Hoy no reparo en la brisa de tus labios,
Ni tampoco en lo nocturno de tu pelo.
Llevo entre silencios la pausa de mi anhelo,
Que dibuja pasajes muy secretos,
Y tersa tu piel como lucero,
Acompaña el dormir de mis sentidos.
No acostumbro hablar mientras te duermo,
Ni a correr entre palabras sin recuerdos,
Hoy te siento aquí cuasidormida,
Como yo pensándote en silencio.
Tenso la seda y hago ataduras,
Evitando así quedar sin freno,
Porque soñarte entre mis ideas,
Es romper los juramentos.
Hay aromas de rosas y jazmines,
Y de fruta fresca recién servida,
Y en lo más íntimo de tu seno,
Se cobija mi palabra aún dormida.
Es placer sin nombre poder verte,
Entre sueños y sábanas tendidas,
Y en lo más profundo de mi deseo,
Solo espero despertar,
Y aún a mi lado… verte dormida.