adrian parra

tu adiós

 

como un relámpago que cruza la noche oscura,
iluminando mi penumbra
así apareciste tú.
llegabas con palabras, sueños y pequeñas acciones,
tan inesperadas como cambiantes.
como la luz de un faro que en medio de la tormenta
guiaba mis pasos, así apareciste tú.
me hablabas de caminatas en las nubes,
y de como se sentiría al estar allá,
contemplando el atardecer y la magnificencia de el ocaso.
fuimos presa del destino y de una distancia indiferente, y sin embargo
el sentimiento se acrecentaba y nuestras almas pedían encuentro.
encuentro que se dio de manera tan repentina como inesperada
pues los intentos planeados habían sido infructuosos.
y no hubo mejor confirmación de aquel sentimiento,
¡que un beso!, pero no un beso cualquiera
era un beso imprevisto, in imaginado como todo lo que sucedía contigo
fue como si mi alma tocase la tuya,
y sin decir palabra alguna me interne en tus brazos,
para sentir tu calor y calmar mi corazón
aunque fuese solo esa noche,
pues como siempre el destino ya había planeado un adiós.
¡tu adiós!

 

la ultima opción de amor.