Murialdo Chicaiza

OLEO II

Ella se cubre con sus brazos de piel

inocente y tímida, es una mujer

sabe que la belleza debe cubrirse

para ser expuesta en el preciso instante.

 

Yo la miro a dos pasos y mi pincel

es grácil colibrí en plena primavera

buscando los colores que no hallaré

en tanto se agita en calma el universo.

 

Al frente una ventana ovalada mira

cual espejo de alabastro y tul de nubes

mientras la luz la descubre desnuda

acaricia sus muslos y reverbera.